El 80 por ciento de los alumnos gitanos que comienzan la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) abandonan sus estudios antes de concluir esta etapa y en el caso de las niñas la mayoría dejan el colegio en el paso de primaria a secundaria, mientras que los niños lo hacen unos cursos más tarde.

Según un estudio de la Fundación Secretariado Gitano, en colaboración con los Ministerios de Educación y Trabajo y Asuntos Sociales, se ha logrado la normalización educativa de la población gitana respecto al acceso a la escuela, pero no en la continuidad de los estudios por la falta de referentes en las familias.

Las alumnas gitanas se tienen que enfrentar a mayores obstáculos para entrar en secundaria, aunque las que lo consiguen permanecen más cursos que los chicos, como señala el dato de que en el último curso de la ESO el porcentaje de chicas (63,4 por ciento) casi dobla al de chicos (36,6%).

Respecto a los resultados académicos, el 32 por ciento de los alumnos gitanos aprueba todas las asignaturas, frente al 58 por ciento de los payos.