Agentes Rurales de la Generalitat abatieron ayer en La Senia (Tarragona) al perro salvaje de gran envergadura que varios vecinos de la zona confundieron con una leona, y para cuya captura se había desplegado un dispositivo de unas 40 personas.

Los agentes localizaron al perro en el Mas de la Menescala y, si bien tenían montado un dispositivo de jaulas para capturarlo con vida, éste no fue efectivo. Además, ante la llegada de la noche, se descartó el uso de anestésicos por su tardanza en hacer efecto, y finalmente el animal fue abatido.

El perro, que mantenía en alerta desde hace cuatro días a vecinos y autoridades de la zona, era un macho de pelo corto color canela, de 1,55 metros de largo y 75 centímetros de alto.

La raza del cánido no está confirmada, si bien todo indica que sería un cruce de razas "potencialmente peligrosas". Además, el animal no llevaba collar ni microchip, y diferentes heridas en cuello y orejas llevaron a concluir a los agentes rurales que debía llevar asilvestrado desde hacía tiempo.

RECURSOS COSTOSOS Por otro lado, el subdelegado del Gobierno en Castellón, Antonio Lorenzo, explicó que los ciudadanos "tienen que saber" que los recursos movilizados en la búsqueda del perro, al igual que en otros casos, "son importantes y costosos".

Lorenzo, que realizó estas declaraciones tras ser preguntado por el tema, explicó que en la búsqueda del animal han participado Mossos d´Esquadra, efectivos de la Generalitat Valenciana y la Guardia Civil, especialmente el Seprona.