UN JUEZ DE VILANOVA i la Geltrú considera que hay indicios de que el hombre, que fue detenido hace dos días en Barcelona por los Mossos d´Esquadra, pueda haber cometido un supuesto delito continuado de abusos sexuales a menores. El acusado, de 33 años, regenta una tienda de golosinas en el municipio, donde se produjeron los abusos.