Fardos de cocaína arrojados desde avionetas sobre la selva de Guinea-Bissau, todoterrenos cargados de esa droga atravesando el desierto del Sahara, barcos con las bodegas llenas de nieve en aguas de Liberia, pasajeros intentando viajar de Casablanca a Barcelona con bolas de ese narcótico en el estómago... Bienvenidos a Africa, la nueva ruta elegida por las mafias colombianas para transportar la cocaína hasta Europa y EEUU. La debilidad de muchos gobiernos africanos, la porosidad de las fronteras y la falta de medios de vigilancia han hecho de Africa una auténtica autopista para el transporte de droga.

La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) señala que un millón de kilos de cocaína circulan al año por todo el planeta. Según la Interpol, 200.000 de esos kilos ya transitan por Africa, donde la policía se ha incautado de 45.000 kilos desde el 2004.

La mejora de la vigilancia en las rutas tradicionales de la droga ha obligado a los cárteles a cambiar sus circuitos. "La importancia que está cobrando Africa occidental y central como punto de tránsito de las remesas de cocaína destinadas a los mercados europeos se hace cada día más patente", señala el informe de la ONUDD del 2007. Según ese documento, el 12% de la droga incautada en Europa en el 2006 entró por Africa. En el 2005 fue el 9%. No obstante, la Interpol señala que esas cifras se quedan cortas y que posiblemente al menos dos tercios de la cocaína que llega a Europa ha pasado por el continente africano.

EL GRAN ALMACEN La DEA, la Agencia Antidroga de EEUU, confirma este fenómeno: "Los traficantes colombianos colaboran con mafias africanas y se están aprovechando de la debilidad de los Gobiernos para trasladar la cocaína a Europa, especialmente a España, Italia, Portugal, Holanda y Francia".

"Africa es el gran almacén de la droga colombiana", explica un agente español especializado en la lucha contra el crimen organizado. "La almacenan en al menos 10 países --Guinea-Bissau, Ghana, Nigeria, Costa de Marfil, Benín, Togo...-- y la van subiendo hacia el mercado europeo y estadounidense", reseña, mientras avisa de las "enormes posibilidades que el entorno africano brinda a las mafias". Un ejemplo: un gramo equivale al sueldo mensual de un policía de muchos países africanos.

El mecanismo de transporte es variado. Las mafias trasladan la droga a Africa por vía marítima y aérea en grandes cantidades. La mayoría, aproximadamente el 60%, sale de Brasil --cuya costa es la más cercana a Africa--, y el resto, de Colombia y Venezuela. Una vez en Africa se almacena, y luego, con Ghana y Nigeria como centros de distribución, se traslada a Europa en cantidades menores y de múltiples maneras.

Un método muy utilizado es el de pequeñas avionetas que van subiendo hasta territorio europeo realizando escalas en pequeños aeródromos. También se emplea mucho la vía marítima, cargando la droga en barcos mercantes que cubren la ruta comercial con Europa o a bordo de barcos pesqueros. El pasado 30 de enero, la marina francesa se incautó de 2.400 kilos de cocaína a bordo de un mercante que navegaba por las costas de Liberia. Además, se ha constatado una creciente importancia de Portugal como punto de llegada a Europa de la droga, ya que ese país tiene estrechos lazos comerciales con Estados africanos.

INMENSIDAD SAHARIANA Y después quedan la ruta terrestre que, a bordo de 4x4, traslada la droga cruzando de sur a norte el desierto del Sahara. La importancia de esa ruta se ha constatado con las crecientes incautaciones en países como Burkina Faso y Malí. El último decomiso se importancia se produjo a principios de enero en Tin Zauatín, en medio de la inmensidad sahariana, donde 650 kilos fueron abandonados por narcotraficantes tras un enfrentamiento armado con tropas malienses. Otro método son las mulas humanas.