Un total de 85 inmigrantes, 11 de ellos posiblemente menores, fueron detenidos ayer por agentes de la Guardia Civil en Las Palmas de Gran Canaria y Motril (Granada). Una patrullera del Instituto Armado interceptó un cayuco con 55 sin papeles de origen subsahariano a bordo, después de que el barco fuera avistado en alta mar por el Servicio Aéreo de Rescate cuando se dirigía al sur de Gran Canaria.

El cayuco fue conducido al muelle del municipio grancanario de San Bartolomé de Tirajana, donde los inmigrantes fueron atendidos por la Cruz Roja. Todos se encuentran en buen estado de salud.

Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional interceptaron en una playa de Motril a otros 30 inmigrantes, cuando intentaban huir tras llegar a la costa en una patera de grandes dimensiones. La policía calcula que en la barca viajaban unos 40 ciudadanos marroquís.

La patera fue detectada sobre las ocho de la mañana por un pescador, que alertó a la policía. Minutos después, sobre las 8.10, llegó al lugar una patrullera de la Guardia Civil. Pero, según el instituto armado, los integrantes de la barca "comenzaron a correr a gran velocidad" y unos 10 lograron huir.