A sus 41 años, Carlos Javier Magdaleno Plata lleva media vida trabajando en la policía local de Plasencia. Es muy conocido y más desde que desde el mes de octubre está destinado al acompañamiento y protección de la alcaldesa. Pero pocos saben que trabajó en el País Vasco en servicios de protección a víctimas del terrorismo y precisamente ahora acaba de recibir la Cruz de Santiago de la Asociación Nacional de Guardias Civiles Marqués de las Amarillas "por su trabajo personal y profesional por la paz y en defensa de los derechos humanos; por su cariño, generosidad y comprensión con las víctimas del terrorismo", entre otros aspectos.

--¿Orgulloso de esta distinción?

--Sí porque es un reconocimiento, una satisfacción, que valoren tu trabajo, tanto las víctimas como una vez que te vas a casa sabiendo que todo a ido bien".

--Plasencia y el País Vasco no tienen nada que ver...

--Aquello no es esto. Allí tienes que ir una hora antes para recoger a la persona que proteges y estar pendiente de itinerarios, horarios... Plasencia es una ciudad tranquila, aunque está Portugal al lado y ya se encontraron zulos en Serradilla, pero cuando se trabaja en el País Vasco, aprendes a tener 100 ojos, no te relajas porque cualquier persona puede tener una segunda intención y hay que estar siempre a la expectativa.

--Es lo que hace ahora con la alcaldesa...

--Sí. Desde octubre estoy encargado del servicio de protección y seguridad de la alcaldía, pero no se trata de que la alcaldesa necesite protección, es más bien un acompañamiento, custodia y protección claro en el caso de alguna incidencia. Está regulado en las normas marco de la policía local.

--¿Le necesita la alcaldesa más ahora?

--Sí porque hay mucho paro y se acercan las elecciones.

--Con lo que tendrá dedicación exclusiva...

--Claro, ahora dependo de la agenda de la alcaldía, pero no me importa porque me gusta mi trabajo. Formo parte del departamento de educación vial y he trabajado en tráfico, en seguridad ciudadana... Soy polivalente y siempre me ha gustado aprender y ser lo más profesional posible en mi trabajo.

--¿Por eso decidió ir al País Vasco?

--Sí. En los cursos que hacemos decidí especializarme en escolta y también estoy habilitado por el Ministerio del Interior como director de seguridad y también he recibido instrucción en conducción, en repeler agresiones y soy instructor de tiro por la Guardia Civil. Al País Vasco fui a ejercitar lo aprendido y en mi tiempo libre porque yo cumplía aquí con mi trabajo y juntaba días para especializarme allí.