Un brote con al menos 657 casos de covid-19 en una planta procesadora de carne en el oeste de Alemania ha encendido todas las alertas y ha provocado el cierre de escuelas y guarderías en el distrito afectado.

El foco de este brote de coronavirus se sitúa en un matadero de la empresa Tönnies en Rheda-Wiedenbrueck, en el estado de Renania del Norte-Westfalia. Según directivos de la firma, el brote podría estar relacionado con el viaje de algunos de sus trabajadores a sus países de origen en Europa del este a partir de la relajación de los controles fronterizos.

«Sabíamos que (cuando las fronteras europeas empezaron a reabrirse) estábamos expuestos a nuevos riesgos (...) Realizamos pruebas adicionales a las personas que regresaban de vacaciones. Pero no logramos mantener alejadas estas fuentes o esta fuente (de infección)», manifestó ayer Gereon Schulze Althoff, el responsable de Tönnies a cargo de la respuesta a la pandemia.

INSTALACIONES COMUNALES / Según la cadena de televisión NTV, muchos empleados de esta planta son extranjeros y están alojados en instalaciones comunales.

Las autoridades del distrito de Guetersloh, donde se encuentra la planta, ordenaron el cierre del matadero, así como el aislamiento y la realización de tests a todos aquellos que hayan trabajado recientemente en esta procesadora, poniendo a unas 7.000 personas bajo cuarentena. De momento se han hecho pruebas a 1.050 personas. Los colegios y guarderías cerrarán hasta final de mes, que es cuando concluye el actual curso escolar.

La noticia del brote se dio a conocer ayer durante la reunión de la cancillera, Angela Merkel, con los estados para analizar los progresos en la lucha contra la pandemia. «Por estos brotes, vemos que el virus no se ha ido», dijo Merkel, al tiempo que consideró que se está «muy lejos de un aumento exponencial», por lo que el país mantendrá su plan de desescalada.

El 8 de mayo se localizó otro brote en un matadero de la localidad de Coesfeld, en el oeste, con 129 casos. La pandemia, de coronavirus, que en Alemania ha registrado 188.474 casos y 8.844 muertes, ha puesto de manifiesto la dificultad de cumplir las medidas de distancia social e higiene en el sector cárnico, lo que el mes pasado llevó al Gobierno a anunciar una reforma del ramo, caracterizado por la mano de obra temporal e inmigrante.