El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publica este viernes el decreto-ley por el que se flexibilizan los horarios comerciales para la venta de productos y servicios básicos, con el objetivo de reducir las aglomeraciones en los establecimientos y de que los consumidores puedan abastecerse de productos de primera necesidad con mayores garantías.

En virtud de esta norma, aprobada en Consejo de Gobierno y que entra en vigor mañana, se permite también a los establecimientos realizar entregas a domicilio los siete días de la semana, un servicio "muy demandado" especialmente por las personas mayores, con problemas de movilidad o de salud.

La crisis sanitaria que ha dado lugar a la declaración del estado de alarma y la voluntad de minimizar el contagio y garantizar el abastecimiento de productos básicos fundamenta la "extraordinaria y urgente" necesidad de adoptar esta medida, informa la Junta en una nota.

Se pone en marcha cumpliendo todas las exigencias y recomendaciones sanitarias para que los consumidores puedan adquirir los alimentos, bebidas y productos de primera necesidad "con todas las garantías", hecho que contribuye a evitar la propagación del virus.

Con este nuevo decreto se posibilita la apertura al público durante los días no hábiles a efectos comerciales mientras dure el estado de alarma con el objetivo de favorecer que las compras en los establecimientos se realicen de forma espaciada en el tiempo, reduciendo aglomeraciones, así como evitar al máximo el traslado entre municipios próximos.

Esta medida, además, permite que las empresas dispongan del tiempo necesario para llevar a cabo en sus establecimientos las labores de desinfección que correspondan, así como la reposición de productos para garantizar el abastecimiento.

Concretamente, los establecimientos y superficies comerciales de venta minorista podrán permanecer abiertos al público durante los días no hábiles a efectos comerciales, solo y exclusivamente para la venta de productos y servicios básicos de aimentación, bebidas, productos y bienes de primera necesidad; productos veterinarios, médicos, ópticas y productos ortopédicos; productos higiénicos; prensa y papelería; combustible para la automoción; equipos tecnológicos y de telecomunicaciones y alimentos para animales de compañía.

Asimismo, los establecimientos y superficies comerciales tienen que delimitar claramente los espacios accesibles al público dedicados a la venta de estos productos.

Los establecimientos comerciales que en domingos y festivos no autorizados abran y dispongan para la venta servicios o productos no referidos serán sancionados.

Este decreto-ley, que tendrá una vigencia temporal marcada por la evolución de la pandemia y la normalización de la situación actual, viene a completar aquellas adoptadas por el Gobierno de la nación y que se han plasmado en distintas normativas dirigidas a reforzar el Sistema Nacional de Salud, como el Real Decreto 463/2020, de 10 de marzo; el Real Decreto Ley 7/2020, de 12 de marzo; y el recientemente aprobado Real Decreto 8/2020, de 17 de marzo.