Dos meses después, y tras haberse cobrado la vida de tres personas, provocar siete abortos y enfermar a más de 200 personas en todo el país, fundamentalmente en el Sur, el brote de listeriosis vinculado al consumo de carne mechada 'La Mechá' de la firma Magrudis se da por concluido. Andalucía levantó este jueves la alerta sanitaria después de que no se haya registrado ningún nuevo contagio en los últimos 20 días, aunque se mantienen las medidas de vigilancia habitual para este tipo de infecciones. En cualquier caso, la gestión del brote ha servido para cuestionar el sistema de inspecciones en las empresas alimentarias, por lo que el ejecutivo regional anuncia cambios en estos protocolos. Por ejemplo, que el resultado de los autocontroles sea transmitido también a las autoridades sanitarias.

En rueda de prensa, el consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, confirmó que el riesgo de nuevos contagios es casi nulo, dado que los productos cárnicos que provocaron la toxiinfección alimentaria ya están fuera de los circuitos de producción y distribución. Además, el plazo de incubación, estimado en unos 70 días, está próximo a concluir. El fin de la alerta sanitaria supone, por tanto, la conclusión de las medidas extraordinarias puestas en marcha, como el gabinete técnico o los protocolos de tratamiento en atención primaria y hospitales, que movilizaron a cerca de 96.000 profesionales sanitarios y supuso, entre otras acciones inéditas, el contacto con más de 39.000 embarazadas de la comunidad, de las que cerca de 2.249 recibieron tratamiento antibiótico de manera preventiva.

Así, en estos momentos ya solo quedan en los hospitales cuatro personas hospitalizadas, frente a las 125 que llegó a haber el 22 de agosto, cuando se alcanzó el pico de ingresados por la listeria. Asimismo, la cifra final de afectados en Andalucía es de 204 personas, dado que a trece de los afectados contabilizados inicialmente los laboratorios no los vinculan con la cepa detectada en la carne mechada de Magrudis. En este sentido, el consejero de Salud subrayó que se han inspeccionado 1.800 establecimientos, de los que se han retirado casi 10.300 kilos de embutidos cárnicos. La mayor parte de ellos, 8.400, procedentes de Magrudis. La gestión del brote sigue activa por tanto solo en su fase judicial, donde prosigue la investigación sobre las posibles responsabilidades de los propietarios de la empresa donde se originó la crisis, que están actualmente en prisión preventiva.

MAYOR TASA DE SUPERVIVENCIA

Aguirre defendió de nuevo la gestión sanitaria de la crisis, ya que se ha afrontado el mayor brote de listeriosis de Europa con una tasa de supervivencia que supera con creces a otros episodios similares, y que se sitúa en el 98,6%, frente al 78% de un brote parecido en Estados Unidos. Esa respuesta médica inmediata y homogénea, con la creación de protocolos comunes y recomendaciones de tratamiento antibiótico más amplia de la habitual ya ha sido trasladada a los responsables de Salud de otras regiones, que los están implementando por si acaso.

No obstante, reconoció que se han cometido algunos errores que se fueron solucionando sobre la marcha, entre los que citó que las muestras de los laboratorios no se estaban enviando bien o en las propias relaciones con el Ayuntamiento de Sevilla, encargado de las inspecciones y del análisis de los productos. Para evitar nuevos fallos, el responsable andaluz de Salud anunció que el gabinete técnico y los profesionales que han participado en la gestión de la crisis están revisando los protocolos para reorientarlos. De momento, se trabaja con los ayuntamientos de Sevilla, Málaga y Granada los únicos andaluces con competencias en seguridad alimentaria para homogeneizar criterios sobre las inspecciones a las empresas alimentarias. Asimismo, y para conciliar la normativa que deja en manos de las empresas la responsabilidad de los controles periódicos, la Junta quiere que los resultados de esos autocontroles lleguen también a las autoridades sanitarias, al tiempo que se trabaja en el diseño del nuevo plan de inspecciones de empresas alimentarias.