El titular del juzgado de instrucción número 6 de Madrid ha archivado la causa contra la clínica Isadora de Madrid al no haber el "más mínimo indicio" de que practicara abortos ilegales. El juez acusa a los guardias civiles del Seprona que se hicieron con restos de fetos para demostrar que el centro actuaba al margen de la ley de articular una investigación inquisitorial y de manipular la realidad. Interior investigará si la actuación de los agentes fue la correcta.