Angel Fuentes Domínguez es el responsable de que el extremeño Antonio Millán Cabrera pueda regresar hoy junto a los suyos a su localidad natal de Puebla de Alcocer. No se conocen, Angel es arqueólogo forense, Antonio un maquis, un nombre más de una lista en la que miles de desaparecidos esperan su turno para regresar junto a su familia, sus hermanos, sus esposas, aunque sea con más de 50 años de retraso. El joven gerrillero --cuando murió contaba 28 años de edad-- podrá volver a casa gracias al trabajo de un equipo de voluntarios integrado por 11 personas que hoy llevarán a cabo la exhumación de su cuerpo en el cementerio civil de Huélamo (Cuenca).

"Este es sólo el último eslabón de un largo proceso tanto para los estudiosos como las familias" explica Angel Fuentes. Los primeros logran hallar nuevas pistas sobre el paradero de los maquis que se perdieron para siempre en los montes tras la Guerra Civil; pero lo más importante es que "los familiares logran cerrar para siempre una herida abierta y pueden perdonar, aunque nunca consigan olvidar", reconoce.

Este Doctor en Arqueología lleva toda la vida dedicado a recuperar vidas , aunque confiesa que recaló en la Arqueología Forense hace poco más de cinco años y que lleva tres entregando parte de su tiempo a recuperar los cuerpos de los maquis, lo que él define como "Arqueología de los Derechos Humanos", puesto que lo que trata es "devolver a un lugar digno a todos aquellos a los que una guerra tiró al olvido" al lanzarlos a la tierra. " Hemos llegado a sacar el cuerpo de un maquis junto al de un cerdo en una fosa", cuenta.

Por este motivo confiesa que para él participar en estas exhumaciones es "un deber ético y moral" una tarea gratificante con la que puede "ofrecer a las diez mil personas que aún buscan a sus parientes, la posibilidad de que tengan un cuerpo que enterrar y un lugar al que llevar flores o recordarle".

Con esta motivación, los sobrinos-nietos del guerrillero extremeño acuden hoy a un pequeño pueblo de la sierra de Cuenca a recoger el cuerpo de su tío-abuelo Antonio, que con la ayuda de Angel, podrá volver a casa.