Amedianoche del lunes las barras de control del reactor nuclear de Ascó 1 descenderán dentro del núcleo hasta detener la actividad atómica. Las paradas programadas son periódicas en estas instalaciones, pero esta es especial. De común acuerdo esta vez, la dirección de la planta y el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) han decidido adelantar la fecha de la operación al martes para inspeccionar de forma exhaustiva el recinto tras la fuga radiactiva ocurrida en noviembre del 2007 y no comunicada hasta el 6 de abril. Estará, como mínimo, tres semanas. Los ecologistas celebraron la medida como una victoria. Se entrará en sectores en los que es imposible si funciona.