A la hora de delatar a alguien, es preferible mantener el anonimato. Eso es lo que deben de pensar las más de 1.800 personas que llamaron al teléfono facilitado por la oenegé británica Crimestoppers para dar pistas sobre delincuentes huidos (900.555.111). La asociación publicó en noviembre en periódicos de Marbella las fotos de los 10 criminales más buscados por Scotland Yard en la Costa del Sol y habilitó un teléfono gratuito en el que quien llama no se identifica. Como resultado, se ha detenido a cuatro de ellos.

El primer arresto se produjo al mes de que se publicaran las imágenes en periódicos locales y británicos de Marbella. Gracias a la información facilitada, la policía detuvo a Anthonny D. Simmons, narcotraficante acusado de defraudar seis millones de euros con el tráfico ilegal de tabaco. Fue apresado en un polígono en la provincia de Murcia.

OTROS DETENIDOS Pocos días después, fue arrestado Markus Jamal, presunto cómplice de asesinato. Los otros dos detenidos son Dante Latreche, implicado en un fraude con tarjetas de crédito y capturado en Reino Unido, y William David Jack, acusado de varios robos con violencia y que se había instalado en la Comunidad Valenciana. La oenegé se encargó del primer filtro de la información, pero el grueso de la investigación lo llevó a cabo la policía española, en colaboración con Scotland Yard. Fueron los agentes británicos los que facilitaron a Crimestoppers la lista de delincuentes que podrían esconderse en España. Cualquier información sobre el paradero de alguno de ellos se recompensará con miles de euros.

España, como el resto de países turísticos, es uno de los destinos predilectos por los criminales que huyen, según el jefe del Grupo de Fugitivos de la policía. Una de las razones es que hay muchas colonias de extranjeros y por tanto "les es fácil camuflarse", según el inspector. Llama la atención que Cataluña esté en el tercer puesto del ranking del refugio preferido por los fugitivos, precedido de Málaga y la Comunidad Valenciana, pero por delante de Baleares o Canarias. No obstante, el agente destaca que "no se puede pensar que España es el país que más fugitivos recibe" y pone como ejemplo que en el 2006 hubo 30 millones de turistas y se recibieron 274 órdenes de búsqueda.

La propensión de los delincuentes británicos a esconderse en la Costa del Sol ha hecho que los rotativos sensacionalistas británicos la califiquen como la ´Costa del Crimen´. A eso se agarran los ingleses que aprueban la operación, como Thomas, que vive en Marbella y está harto de que "la imagen de sus compatriotas se asocie a las mafias y a los actos delictivos".

Es la primera vez que Crimestoppers actúa fuera de EEUU y el Reino Unido. La oenegé surgió en los años 80, cuando unos vecinos en EEUU se organizaron para resolver un asesinato y facilitaron un teléfono que mantenía en el anonimato al informador. Una de las sorpresas de esta campaña ha sido el gran número de españoles (el 20% de las llamadas) que han dado pistas sobre los delincuentes. "No esperábamos tanta ayuda porque los españoles no están acostumbrados a estas campañas", destaca una portavoz de la embajada británica. El éxito de la iniciativa ha hecho que Crimestoppers estudie aplicarla este verano en Alicante y Canarias.