Antonio Banderas era uno de los favoritos para ganar el domingo el Tony al mejor actor de un musical. Pero, aunque tiene ganas de ampliar hasta noviembre su compromiso en Nine , se quedó a las puertas del premio en el Radio City Music Hall. Quizá no le dio suerte su versace ni el de Melanie Griffith, que iba de verde esperanza (foto). O quizá su papel de galán en una obra premiada como mejor revival no era el mejor para la noche en que Broadway salió del armario. Al español le arrebató el premio Harvey Fierstein, que ya tiene tres Tony y que protagoniza la obra triunfadora, Hairspray , que obtuvo ocho estatuillas.

Pocas veces se ve en la televisión de EEUU un beso entre personas del mismo sexo. Y Marc Shaiman y Scott Wittman, galardonados por la partitura de Hairspray , se dieron uno de película.