La muerte de un nigeriano esta madrugada en el barrio de Son Gotleu, en Palma de Mallorca, ha desencadenado una batalla campal entre vecinos de la nacionalidad del fallecido que han arremetido contra los agentes de policía que han acudido al lugar.

La policía ha detenido a tres personas y mantiene un dispositivo de vigilancia para evitar nuevos altercados. El portavoz de la Policía Local ha calificado la situación en Son Gotleu de "calma tensa". Todo ha comenzado alrededor de las 00.40 horas tras la muerte de un ciudadano nigeriano de 33 años, que se ha precipitado desde un cuarto piso del inmueble situado en el número 58 de la calle Tomás Rul·lan de Palma, por causas que se están investigando.

Varios vecinos han denunciado que el fallecimiento se había producido tras una pelea, extremo que la policía no ha podido confirmar por el momento. Cuando la policía ha llegado al lugar, un grupo de gente "muy nerviosa" rodeaba al fallecido y "todo ha ido derivando en un problema racial".

Los vecinos han acusado a los agentes de "no detener a los gitanos e ir contra los negros", según el relato del portavoz de la Policía Local. Cuando los agentes han intentado comprobar el estado del fallecido, varios de los presentes les han indicado que "un blanco no puede tocar a una persona negra muerta".

La confirmación del fallecimiento ha provocado que la veintena de hombres que se había congregado alrededor del accidentado empezara a exhibir un creciente nerviosismo, tras lo cual se ha iniciado una revuelta multitudinaria que la policía no ha podido apaciguar hasta pasadas las tres de la mañana, según el relato de los agentes policiales.

Hasta 150 personas se han congregado en la zona y han lanzado piedras contra la policía y sus vehículos. Algunos de los violentos han quemado dos contenedores de basura y han causado graves daños a varios turismos y al mobiliario urbano. Los agentes han tenido que practicar cargas para restablecer el orden y han detenido a tres personas por daños y atentado contra la autoridad.

El grupo de Homicidios de la Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación para determinar las causas de la muerte y esclarecer si el hombre fallecido se precipitó voluntariamente o fue arrojado al vacío, tal y como aseguran sus compatriotas.

El testimonio de esta comunidad asegura que hombres de raza gitana habrían arrojado al hombre nigeriano desde la altura de cinco pisos.