El minisubmarino francés contratado por el Gobierno español para comprobar el estado de los restos del Prestige , sumergidos a 3.500 metros de profundidad, no encontró ayer indicios de vertidos en la zona del hundimiento.

El Nautile llegó en la noche del domingo a las coordenadas indicadas a bordo del barco Atalante y se sumergió "tan pronto lo permitieron las condiciones meteorológicas". Su misión era buscar indicios de fugas en el Prestige en su análisis de superficie. Su primer informe es esperanzador, ya que no parece haber derrames en la carga del petrolero. El batiscafo se sumergirá durante los próximos siete días con la intención de buscar la proa y la popa del buque hundido, comprobar su estado y verificar sus impresiones.

2.210 TONELADAS RECOGIDAS

El Nautile es uno de los elementos más llamativos del numeroso contingente de embarcaciones extranjeras que participan en las labores de vigilancia y contención de la contaminación. Dos de los barcos que llevan más tiempo trabajando, el francés Ailette y el holandés Rijndelta , descargaron ayer 2.210 toneladas de fuel que recogieron en el mar. En la zona del Cabo de Finisterre y Corrubedo están trabajando otros dos buques más; el francés Alcyón y el holandés Arca .

El buque alemán Neuwerk actuó en las manchas más grandes en Fisterra y Corrubedo. En labores de vigilancia en la ría de Arousa estuvieron el belga Union Berver y el noruego Boa Siw-Far Scout , y en la ría de Muros, el inglés Sefton Supporter .

El petrolero British Shield --con 6.000 metros cúbicos de capacidad-- apoyará la recogida de fuel en el mar, una operación a la que ayer se sumó el buque danés Gunnar Seidenfaden . Hoy se incorporarán los italianos Aqua Chiara y Tito .