Washington La visita de Benedicto XVI es considerada en Washington un gran acontecimiento. Como muestra de la deferencia con la que la administración Bush trata al Papa, el presidente le recibió anoche a pie de pista en la base militar de Andrews, junto a la primera dama, Laura Bush, y su hija Jenna. Hasta ahora, no había dispensado este honor a ningún mandatario extranjero.