Con su especial habilidad para manejar internet, un grupo de menores de siete provincias españolas consiguieron estafar a 500 usuarios de la red. Utilizaban los números de las tarjetas de crédito de éstos para comprar productos en tiendas virtuales de manera que los gastos se cargasen en la cuenta corriente de las víctimas.

La Brigada de Investigación Tecnológica del Cuerpo Nacional de la Policía ha detenido a 11 personas, la mayoría menores, que creaban y utilizaban páginas web simuladas donde ofrecían, por ejemplo, servicios de recarga de móvil. De ese modo conseguían los datos de las personas que se conectaban y también de sus cuentas corrientes. Acceder a estas páginas simuladas era relativamente fácil, ya que las víctimas llegaban hasta las webs a través del buscador de internet Google tras escribir las palabras recarga, recarga móvil o recargas móviles. Se llaman páginas simuladas porque sus creadores incluyen formularios cebo para hacer creer a los usuarios que al acceder a ellas se encuentran en webs auténticas. De este modo, los estafadores consiguen fácilmente que las víctimas rellenen con sus datos y con el número de la tarjeta los espacios vacíos si quieren conseguir, en este caso, por ejemplo, la recarga del teléfono móvil.

Dos de los 11 detenidos en esta operación policial son unos hermanos de Blanes (Selva), uno de 22 años y el otro menor de edad, que fueron arrestados en su casa y que quedaron en libertad con cargos. La policía realizó el resto de detenciones en Alicante, Cádiz, Zaragoza, Málaga, Sevilla y Pontevedra. La mayoría eran menores que viven con las familias.