Junto a las advertencias de los efectos perjudiciales del tabaco como Fumar provoca cáncer mortal de pulmón o Fumar acorta la vida, que empezaron a usarse el 30 de septiembre del 2003, los fumadores españoles verán a partir de mayo una serie de fotos impactantes de las consecuencias del humo de los cigarrillos en el organismo. La fecha fue anunciada ayer por la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, una vez que ha concluido el periodo de alegaciones otorgado a los fabricantes. Solo falta el trámite del informe al borrador, no vinculante, del Consejo de Estado.

Dientes picados, bocas ulceradas, pulmones cancerosos y cirugías a corazón abierto son algunas de las 42 fotografías propuestas por la Comisión Europea. España ha elegido 14, con montajes alegóricos como pitillos simulando los barrotes de una cárcel o la disfunción eréctil de un pene, además de crudas fotografías de fetos o niños inhalando el humo de un cigarrillo. Las tabacaleras han centrado sus alegatos en que las fotos no ocupen más del 50% de la parte frontal de la cajetilla, mínimo recomendado por la OMS, y en retrasar lo máximo posible la fecha de entrada en vigor del real decreto que será aprobado en Consejo de Ministros.

El departamento de Jiménez es partidario de que las imágenes ocupen no menos del 70% de la superficie del paquete y de dar un plazo máximo de seis meses para la venta de los estocs empaquetados antes de la fecha de entrada en vigor de la norma.

La medida, según fuentes de Sanidad, se enmarca dentro del plan del Gobierno de plantar cara al tabaquismo y reducir el consumo. Serviría a modo de avanzadilla de la modificación de la actual ley antitabaco para prohibir fumar en todos los bares y restaurantes sin excepción. "La idea es mostrar imágenes que alerten sobre el daño que provoca fumar, similar a las de los accidentes en las campañas de tráfico, que han sido definitivas para reducir accidentes y muertes por esta causa", expuso una portavoz de Sanidad.

La OMS estima que las cajetillas son la forma "más eficaz y rentable" de transmitir mensajes sanitarios antitabaco. El organismo calcula que un fumador puede mostrar un paquete 20 veces al día, es decir, unas 7.300 veces al año. Los paquetes son vistos por otras personas, como los cónyuges, hijos, amigos y colegas, por lo que también pueden surtir efectos en ellas. "Las advertencias gráficas desalientan a los fumadores al ver los efectos devastadores en la salud", asegura un estudio de la Universidad de Waterloo (Canadá).

Bélgica, el Reino Unido y Rumanía ya disponen en sus cajetillas de tabaco de mensajes y fotos similares a las que se incluirán en España. Otros países de la UE como Francia, Finlandia, Irlanda, Letonia, la República Checa y Malta están siguiendo los pasos españoles. Fuera de Europa, en otros 20 países las cajetillas llevan imágenes similares. Canadá fue el primero.