Cientos de personas, familiares, amigos y vecinos, despidieron ayer a Imperio Argentina en el cementerio de Benalmádena (Málaga), pero ni un solo representante del Ministerio de Cultura hizo acto de presencia en el funeral de la legendaria actriz y cantante, fallecida el viernes por la noche a los 92 años. El reconocimiento al trabajo de la artista llegó por parte de gente anónima que, mucho antes de la llegada del féretro, ya abarrotaba el recinto. Pasadas las dos de la tarde, Magdalena Nile del Río, conocida como Imperio Argentina, Malena para los más íntimos, fue enterrada en el panteón familiar, junto a su hermana y su hija.

La entrada del coche fúnebre en el cementerio, sobre la una de la tarde, fue recibida con los aplausos de un pueblo que se volcó en el sepelio. En la capilla del cementerio se celebró un acto religioso al que sólo accedieron las nietas de Imperio Argentina, otros familiares y amigos. Tras terminar la celebración, los restos mortales se trasladaron a la sepultura, cuyo entorno había sido acordonado.

El público congregado rompió el silencio para despedir a la artista.