Bajo el lema La fatiga mata , transportistas de 65 países reclamaron ayer, Día Internacional contra la Siniestralidad Laboral en el Transporte por Carretera, una reducción de su jornada laboral. Según los sindicatos, en España, el exceso de horas al volante, sumado a otras circunstancias, causó el año pasado la muerte de 371 chóferes profesionales.
En España, las protestas tuvieron lugar en los pasos fronterizos de las provincias de Girona, Guipúzcoa, Salamanca, Huesca, Huelva y Pontevedra. En La Junquera, un centenar de personas provocaron cortes intermitentes de entre 5 y 10 minutos desde las nueve de la mañna hasta la una de la tarde.
Las manifestaciones desencadenaron retenciones de hasta siete kilómetros en dirección a Francia. Al mediodía, la policía autonómica catalana se vio obligada a desviar los vehículos por la salida 2 de la autopista AP-7.
48 HORAS A LA SEMANA Los transportistas reclamaron una jornada de 48 horas semanales. "No pedimos nada del otro mundo. Queremos una regulación del sector porque los transportistas estamos haciendo entre 60 y 70 horas semanales", explicó el secretario general de la Federación de Transporte de CCOO en Gerona, Xavier Lao.
Los sindicatos también reclamaron la habilitación de áreas de descanso más seguras donde puedan dejar el vehículo sin tener que sufrir por posibles robos o agresiones. Según los camioneros, los puntos de reposo más conflictivos están situados en Barcelona y Valencia.
Dentro de sus reivindicaciones, los trabajadores exigieron que sus salarios cubran todo el tiempo de servicio, incluido, por ejemplo, las horas de espera antes de descargar mercancías. Además, solicitaron que se reconozcan enfermedades laborales propias, como el dolor de espalda. Por último, demandaron mayor facilidad a la hora de acceder a la jubilación anticipada.
