Tiene solo 12 años, pero Javier Antón Tejeda es el mejor pescador de España menor de 14 años. Lo atestigua la medalla de oro que se ha traído a Plasencia del Campeonato de España de pesca para menores de 14 años. Pero no es el único oro que ha conseguido, también ha podido colgarse una segunda medalla del mismo metal, conseguida por el equipo extremeño en esa misma competición junto a sus compañeros Francisco Javier Delgado, Alberto Muñoz Rubio y José Antonio Sousa.

Para Javier, de la Unión de Pescadores, este éxito nacional ha sido toda una sorpresa y supone una progresión espectacular porque participó el año pasado en el campeonato nacional, pero "quedé por la mitad, así que no pensaba que fuera a ganar este año". Además, el pantano en que se iba a celebrar el campeonato no le favorecía porque "tenía mucha pesca y había que ser muy rápido pescando peces y no tener ningún parón y yo no soy muy rápido", explica humilde.

Pero la suerte le favoreció y la muerte de numerosos peces en el pantano obligó a trasladar el torneo a otro con menos pesca. "Solo pesqué tres peces en la primera manga, pero por el peso, quedé el primero y en la segunda manga, quedé segundo de zona". Eso le valió el primer puesto nacional y el orgullo de haber conseguido dos medallas.

Es un orgullo para toda la familia, donde la pesca es el deporte rey. Su padre, Miguel Angel Antón, es un apasionado de la pesca, aunque "nunca participó en competiciones, se ha dedicado más a los niños, en que ellos puedan hacer lo que él no pudo", explica la madre de Javier, Mari Luz Tejeda.

Así, el hermano de Javier, Angel, de 17 años, también compite, con los menores de 22 años y está ya en alta competición, a la que pasa ya este año Javier gracias a su oro nacional. Eso significa que toda la familia se marchará la próxima semana a Valencia para participar en el campeonato de selección para el Campeonato del Mundo.

Se celebra el próximo fin de semana, pero la familia Antón Tejeda se marcha antes para poder entrenar y familiarizarse con la zona de competición. Entrenar es lo que hace Javier los fines de semana, en los pesquiles de la capital del Jerte o en los pantanos a los que le lleva su padre y defiende este deporte frente a quienes piensan que es aburrido. "No se trata de lanzar la caña y esperar a que piquen, es un deporte de estrategia, tienes que intentar que piquen y utilizar todos los métodos posibles, diferentes cañas, diferentes anzuelos, diferentes boyas, es divertido", dice animado.

Tanto como la escalada que acaba de descubrir y podrá compaginar con la pesca y los estudios porque "es bueno en los estudios y, mientras no los deje, que practique el deporte que quiera", afirma su madre.