Miguel Carcaño, el asesino confeso de la joven sevillana Marta del Castillo, ha señalado de nuevo a sus amigos Samuel Benítez y el menor Javier G. El Cuco como los encargados de deshacerse del cuerpo de la joven mientras él se quedaba en la casa donde murió limpiando las posibles huellas.

A la espera del juicio, que previsiblemente se celebrará en torno al verano, el juez ha prorrogado la prisión preventiva, ya que los dos años preceptivos vencían el próximo día 16.

Sin sorpresas y sin modificar un ápice su última versión de lo sucedido la noche del 24 de enero del 2009, Carcaño ha comparecido ante el juez que instruye el caso para conocer el nuevo auto de procesamiento, tras dictarse que el proceso será enjuiciado por un tribunal profesional y no por un jurado popular.

LA INSTRUCCIÓN

Y es que hasta ahora, de acuerdo con la versión de que la chica fue violada, el proceso se había instruido para ser juzgado por un jurado popular.

Junto a Carcaño estaban citados los otros tres adultos implicados: Samuel Benítez, su hermano Javier Delgado y la novia de este, María García. Ellos apenas han permanecido diez minutos ante el juez, el tiempo para ratificarse en sus versiones anteriores, en la que se desvinculan del crimen, y conocer los hechos que se les imputan, como encubrimiento y contra la integridad moral de los padres de Marta por no revelar el paradero del cuerpo.

La comparecencia de Carcaño ha sido más larga. El joven ha llegado a los juzgados de Sevilla escoltado por una decena de policías, lo que ha provocado quejas incluso del personal judicial por la imposibilidad de moverse libremente por el edificio.

VERSIÓN REPETIDA

El juez le ha leído su última declaración y, por enésima vez, acerca del paradero del cuerpo de Marta. Miguel ha respondido que lo desconoce, ya que fueron Samuel y El Cuco quienes lo sacaron de la casa y se deshicieron de él, mientras él permanecía limpiando el piso.

En su última declaración llegó incluso a señalar a un tío de Samuel como la persona que les prestó el coche para dicha tarea, aunque esta persona nunca apareció.

Sobre lo sucedido, el joven ha insistido en que no hubo violación y que Marta murió de un golpe en la cabeza. No obstante, el auto de procesamiento se mantiene similar al anterior y le considera responsable de dos delitos de agresión sexual, uno de ellos en calidad de cooperador necesario.

NINGUNA NOVEDAD

Fuentes de la Fiscalía han apuntado que este testimonio no aporta ninguna novedad en lo que ya se conocía, y han manifestado su convicción, apoyada en las pruebas que constan en el sumario, en que todos los implicados saben qué pasó con el cadáver.

Miguel ha mantenido una actitud abatida, con la cabeza gacha, durante su comparecencia, al igual que en anteriores citaciones, aunque a la salida ha mostrado una actitud desafiante y altiva. En sus manos llevaba el auto de procesamiento y la prórroga de la prisión preventiva, que ha sido dictada hoy por el juez.

DOS AÑOS MÁS EN PRISIÓN

Así, Miguel permanecerá en prisión otros dos años como máximo, aunque todo apunta a que el juicio se celebrará este mismo año y por tanto no agotará este tiempo. Pese a que la defensa ha pedido la libertad provisional al entender que ha desaparecido el riesgo de fuga, el juez considera que éste continúa a la gravedad de los hechos y las penas que se le piden y la cercanía del juicio, así como por el riesgo de que destruya pruebas y dado que el cuerpo de la joven no ha aparecido aún.

La entrada y salida de los juzgados de Carcaño ha estado rodeada de momentos de tensión. Los integrantes de la plataforma Todos somos Marta y algunos viandantes que se encontraban por las inmediaciones le han increpado con insultos y gritos de "asesino" o "sinvergüenza", al tiempo que le instaban a decir de una vez dónde está el cuerpo de la chica.