La entidad religiosa Cáritas ha llevado a cabo denuncias sobre la arbitrariedad con que los consulados españoles están denegando visados de entrada a España a personas cuya reagrupación familiar había sido aprobada previamente por la Administración de este país. En un informe, el Servicio de Asesoramiento a Inmigrantes de Cáritas dice haber constatado "prácticas administrativas restrictivas y en ocasiones dudosamente regulares" que "dificultan hasta extremos injustificables la reagrupación". Y acusa a algunos consulados de "denegar solicitudes sin motivo justificado".

Esta entidad dispone de numerosos ejemplos de esas presuntas arbitrariedades. En su informe, pone sobre la mesa la política de los consulados de Nador y Tetuán (Marruecos) de denegar visados a cónyuges de matrimonios registrados poco antes de esa solicitud de reagrupación.

Además, alerta de que se han denegado visados de reagrupación a hijos de marroquís residentes en España argumentando que algún familiar permanece en Marruecos. El consulado dice no considerar conveniente para el menor la reagrupación ya que se separa la familia.