Carmencita, primogénita de la única línea Martínez-Bordiu descendiente de Franco, que no es la de Pocholo, ha decidido desprenderse de sus ropajes. Cual San Francisco de Asís, ha decidido que ya no quiere lujos en el vestir porque ahora prefiere los tejanos y las camisetas, más propios de su vida sencilla y campesina. La nietísima tiene previsto sacar a subasta 65 trajes de alta costura de las firmas Scherrer, Givenchy, Yves Saint Laurent, Christian Lacroix, Chanel, Nina Ricci y Dior, entre otras.

Los vestidos fueron lucidos por Carmen Martínez- Bordiu durante sus matrimonios con Alfonso de Borbón y Jean Marie Rossi, como informa la revista ¡Hola!, una publicación que ha sido testigo de la vida de Carmen desde que nació en El Pardo hasta sus últimos viajes a Libia, acompañada por su actual pareja, Roberto Federici.

La vida de la nieta mayor de Franco está escrita en ¡Hola!. Qué portada tan significativa de los tiempos que vivía España aquélla en la que aparecían abuela, madre e hija con motivo de la puesta de largo de Carmen a los 18 años, celebrada el 16 de julio de 1969, día del santo de las tres mujeres: Doña Carmen, Carmen y Carmencita, se leía en el título sobre una foto de familia.

La revista batió récords con las fotos de la boda de Carmencita y Alfonso de Borbón, celebrada en 1972. Después vinieron la separación, la muerte de Fran --el hijo mayor de la pareja-- y la vida en Francia como Carmen Rossi.

En los últimos años, aquella Carmencita ha ido apartándose de la primera línea social, de modo que ya no necesita sus trajes de fiesta. Quizá lo que necesita es el dinero que le darán por ellos.