La Nena se casó por el rito gitano en 1971. Convivió 29 años con su esposo, con el que tuvo alegrías, tristezas y seis hijos. El falleció en el 2000, tras haber cotizado 19 años a la Seguridad Social. El Estado español le negó la pensión de viudedad. La razón: no estaba casada por lo civil.

Tras un rosario de recursos en el que el Constitucional acabó por rechazar su demanda de amparo en el 2007, María Luisa Muñoz Díaz, la Nena, lloró "de alegría" ayer al plantear su caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, que debe pronunciarse sobre si el matrimonio gitano merece el reconocimiento civil que da derecho a cobrar la viudedad.

Muñoz, gitana y dueña de un puesto de flores en Madrid, compareció ante el tribunal, convencida de que estaba haciendo "algo histórico". "Los he visto serios a los jueces, pero me han sonreído al pasar. Vamos a ganar", dijo al concluir la audiencia.

SENTENCIA DETERMINANTE La Nena se conmovió al escuchar al presidente de la Unión Romaní, Juan de Dios Ramírez Heredia, presente en la vista, quien recordó que en el mundo hay 14 millones de gitanos, "a los que va a afectar esta sentencia". El representante del Gobierno español, Ignacio Blasco, afirmó que conceder la pensión habría supuesto "una violación frontal de la ley".