El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer que en ocho meses se pondrá en marcha un sistema automático de control de infracciones de tráfico, de modo que todos los incidentes se enviarán de manera inmediata a un "Centro Nacional de Tratamiento de Denuncias Automáticas, que se ubicará en León.

Durante la presentación de un nuevo proyecto ferroviario en León, Zapatero señaló que este sistema sustituiría a los actuales radares, pero fuentes de Presidencia explicaron después que la novedad es que todas las infracciones que registren los radares, las cámaras y los sistemas de detección de velocidad media que se implantarán se enviarán a ese Centro Nacional.

a innovación, precisaron las fuentes, consiste en que las denuncias se tramitarán de manera automática, sin intervención de los agentes y durante los 365 días del año, en el Centro de León, que contará con una inversión de 45 millones de euros.

Según apuntó Zapatero, se prevé que en los primeros 18 meses de funcionamiento el Centro tendrá capacidad de detectar y registrar tres millones de denuncias y que cuando opere a pleno rendimiento alcanzará la cifra de cuatro millones de denuncias al año.

El jefe del Ejecutivo destacó la importancia del nuevo sistema: "los conductores deben saber que, en un plazo de ocho meses, la más avanzada tecnología vigilará el cumplimiento de la normativa de tráfico y aquellos que cometan una infracción tendrán una denuncia automática que quedará registrada en el más avanzado sistema informático".

Otras ventajas Junto a la información de los radares, los sistemas de control de velocidad media --ya instalados en algunas ciudades-- permitirán que se registre automáticamente tanto la velocidad en tramos de carretera, como la distancia de seguridad entre vehículos o la disciplina de los conductores en los semáforos o en señales de stop.

Tras apuntar que en todos los países en los que ya se ha puesto en marcha este sistema ha demostrado su eficacia, apostó por el rigor en la persecución de las infracciones de tráfico.

Acompañado de la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, explicó este proyecto durante la presentación en León de la ampliación del proyecto de integración del ferrocarril a su paso por León y San Andrés de Rabanedo.

El sobrecoste de la ampliación del proyecto para soterrar el ferrocarril será de 80 millones y, según Fomento, mejorará el tráfico y permitirá suprimir el paso a nivel del Crucero, una demanda histórica de León que Zapatero calificó de "una gran obra de ingeniería pública al servicio de los ciudadanos".