Muchas personas no son conscientes de lo importante que es utilizar un cepillo de dientes adecuado. Generalmente, optan por la opción más económica del supermercado, pues piensan que todos los cepillos de dientes son iguales, y no tienen una razón de peso para invertir en un modelo eléctrico.

Aunque el uso de un cepillo de dientes manual es, por supuesto, mejor que nada, la mayoría de los profesionales del cuidado de la salud bucal prefieren que sus pacientes utilicen un cepillo eléctrico.

Mucha gente a la que se le recomienda un cepillo de dientes eléctrico, quieren saber si la inversión vale realmente la pena. Después de todo, no solo son cepillos más caros, sino que también hay que comprar cada pocos meses los cabezales de reemplazo.

¿Por qué cambiar a un cepillo de dientes eléctrico?

Los cepillos de dientes eléctricos ofrecen una gran variedad de ventajas.

Estos cepillos hacen todo el trabajo por nosotros. Muchos de ellos incluyen un temporizador para asegurar que el cepillado dure 2 minutos completos, así como una luz indicadora de presión para informarnos de que estamos apretando demasiado, y que posiblemente estemos dañando las encías.

Todo lo que hay que hacer, es mover el cepillo de un dientes otro, ya sea que estemos utilizando los cepillos sónicos Phillips Sonicare que penetran profundamente debajo de la línea de las encías, o los cepillos de Oral-B, que oscilan de un lado a otro.

Como la mayoría de la gente no tiene tiempo para el cuidado de la boca, los cepillos de dientes eléctricos nos dan la oportunidad de cepillarnos los dientes como profesionales, reduciendo la inflamación, eliminando la placa y minimizando la hipersensibilidad.

Hay muchos problemas dentales que un cepillo eléctrico puede ayudar a mejorar, incluyendo las encías retraídas, la sensibilidad del cepillado incorrecto, y la gingivitis por no cepillarse los dientes.

Los cepillos de dientes eléctricos también son una excelente opción para los niños, especialmente si tienen aparatos dentales. Los padres gastan mucho dinero en aparatos de ortodoncia, pero si los niños no se cepillan correctamente los dientes, terminarán sin ellos.

Las personas de edad avanzada con problemas de destreza o movilidad, también pueden beneficiarse de los cepillos de dientes eléctricos. Muchas personas mayores no pueden mover sus manos como quieren, así que si usan un cepillo manual, es probable que dejen placa.

La versión eléctrica limpia sus dientes por ellos, sólo tienen que acercar el cabezal a los dientes, para que pueda eliminar toda la placa y ayudar a prevenir otros problemas dentales.

Consejos para elegir el mejor cepillo de dientes eléctrico

El rango de precios de los cepillos eléctricos es amplio, desde los 20 hasta los 200€, obviamente, cada cepillo es diferente y tiene diferentes características y funciones, y una versión será mejor para una necesidad bucal particular que otra.

A la mayoría les preocupa el coste monetario. Pero hay que tener en cuenta que los cepillos eléctricos pueden rotar o vibrar 30.000 veces por minuto, mientras que un modelo manual apenas llega a 200 veces.

Cualquier herramienta que ayude a mantener la salud de la boca y los dientes, es una inversión que vale la pena, ya que el precio de un cepillo de dientes eléctrico, es solo una fracción de lo que cuesta una una limpieza profunda o una ortodoncia.

Muchos cepillos de dientes eléctricos ayudan a eliminar las manchas de los dientes, lo que es una buena opción para las personas que realmente desean una sonrisa blanca y brillante. Y aún con esta característica, estos cepillos siguen siendo suaves con las encías.

Encontrar el cepillo eléctrico adecuado a nuestras necesidades, que nos asegure una boca limpia y fresca, es la mejor forma de entender los beneficios de mantener una buena salud oral.

Su utilización regular no sólo permitirá espacial las citas con el dentista, sino que podremos disfrutar de una boca más sana, valorando todo lo que un cuidado dental puede ofrecernos.

A algunas personas no les gustan los cepillos de dientes eléctricos porque sienten que no son tan flexibles como un cepillo de dientes manual, de un tamaño más pequeño y ligero, muy fácil de mover.

Pero las opciones eléctricas son muy variadas, y se pueden encontrar cepillos pequeños y ligeros, y cabezales muy pequeños, para limpiar hasta las zonas más difíciles de la boca.

Realmente, la elección de un modelo eléctrico u otro, depende de las necesidades bucales que se tengan. Por ejemplo, si tienes las encías y los dientes sensibles, lo mejor es optar por un cabezal de cerdas suaves y con sensor de presión. Si quieres los dientes más blancos, que tengan opción blanqueante, y si tu problema es una gran acumulación de placa, los sónicos son los que más placa remueven.

Es mejor prevenir que curar

Aunque hemos visto todas las ventajas que tienen los cepillos eléctricos, lo importante es cepillarse los dientes correctamente, durante dos minutos, 3 veces al día (o después de cada comida), sin olvidar pasarse el hilo dental, y acudir a las revisiones periódicas con el dentista.