El máximo responsable de adopciones de China ofreció ayer nuevos detalles sobre las limitaciones de los extranjeros a la hora de adoptar niños chinos y confirmó que la normativa entrará en vigor el próximo 1 de mayo.

El director del Centro Chino de Adopciones (CCAA), Xing Kaimin, confirmó que obesos, mayores de 50 años o solteros ya no podrán adoptar, y señaló otros grupos a los que la adopción estará vetada: recién casados o divorciados y padres con más de cuatro hijos. Tras la aparición de informaciones sobre estas nuevas normas en los medios de comunicación de los países que más adoptan, como Estados Unidos o España, Xing decidió aparecer en la prensa oficial para evitar malentendidos.

"Los criterios y prioridades están diseñados para proteger los intereses y acortar el tiempo de espera para los solicitantes más cualificados", destacó Xing al diario estatal China Daily.

En el caso de los límites a solicitantes obesos, no podrán adoptar personas aquejadas de lo que los médicos consideran obesidad mórbida, es decir, con un índice de masa corporal superior al 40 por ciento. El índice de masa corporal se obtiene dividiendo el peso en kilos por el cuadrado de la estatura en metros, por lo que una persona con una altura de 1,70 metros, por ejemplo, no podrá adoptar en China si pesa más de 115,6 kilos.

"Las personas obesas corren más riesgo de sufrir enfermedades y podrían tener una esperanza de vida menor", destacó Xing.

El director del CCAA también señaló que una pareja deberá llevar más de dos años casada para que su solicitud pueda ser admitida a trámite, aunque si con anterioridad uno de los cónyuges se divorció, el tiempo se aumentará a cinco años. Y confirmó que los candidatos a la adopción deberán tener entre 30 y 50 años (antes el límite sólo estaba en personas que no alcanzaran la treintena). Xing destacó que China "quiere elegir a los más calificados, para que nuestros hijos puedan crecer en aún mejores condiciones" y aclaró que en el futuro podría haber nuevas revisiones.