El maremágnum burocrático en la sanidad tiene los días contados. El Consejo de Ministros dio ayer el visto bueno a la firma de un convenio entre los ministerios de Sanidad e Industria y la empresa pública Red.es para impulsar en toda España la llamada "sanidad en línea". Esta iniciativa permitirá la futura implantación en toda España de la receta electrónica y disponer del historial médico de un paciente en cualquier parte de España de manera automática.

La tarjeta incluirá una historia clínica, en la que quedarán registrados los medicamentos que está tomando el paciente y evitará que los enfermos crónicos tengan que ir al médico cada vez que se les acabe la medicación.

La medida, que comenzará a aplicarse en el 2006 dentro del plan Avanz, cuenta con un presupuesto inicial del Gobierno central de 141 euros. Si todas las regiones se adhieren, el Ejecutivo aumentará su aportación hasta los 252 millones.

Según el Ministerio de Sanidad, el principal objetivo es generalizar el empleo de la tarjeta sanitaria electrónica. El sistema es similar a la tarjeta sanitaria que se viene utilizando en la mayoría de las comunidades autónomas, pero con un chip que incorporará la firma digital.

Los titulares de la tarjeta podrán realizar gestiones on line desde su hogar, como la actualización de sus datos, cambios de médico o solicitar citas.