Las clínicas de abortos reabren hoy sus quirófanos tras el paro inédito de cinco días en el que han dejado de practicar unas 2.000 interrupciones del embarazo. Tras la vuelta a la actividad para no perjudicar a las mujeres que requieren este servicio, los centros estudian radicalizar su postura para hacer frente a la campaña orquestada por los sectores ultraconservadores y el "hostigamiento administrativo" por parte de la Comunidad de Madrid.

Un portavoz de la Asociación de Clínicas Acreditadas de Interrupción del Embarazo anunció que valorarán los paros y estudiarán acciones judiciales contra un juez de Madrid que ha citado a declarar a 25 mujeres que se sometieron a un aborto en la clínica Isadora. Las actuaciones judiciales parten de una denuncia sobre supuestas irregularidades en la gestión de residuos orgánicos y clínicos.