El Ayuntamiento del municipio gerundense de El Port de la Selva cobrará por primera vez los gastos de la búsqueda de un desaparecido, al entender que hubo negligencia por parte de una familia que dejó a su suerte a su hija, quien, por una rabieta se lanzó al mar desde una embarcación.

El concejal de Gobernación de esta localidad de la Costa Brava, Roger Pinart, ha explicado a Efe que la factura asciende a 1.400 euros y que ha sido enviada a una familia belga, cuya hija se lanzó el pasado domingo al mar desde una embarcación tras discutir con su madre y a la que sus progenitores abandonaron a su suerte durante más de cinco horas.

La joven, de 18 años, nadó hasta las rocas de una pequeña cala del parque natural del Cap de Creus, de donde resultaba prácticamente imposible salir a pie por lo escarpado de la zona, según informa Salvamento Marítimo.

Los hechos se produjeron sobre las 18.00 horas y los padres contactaron con la Policía Local sobre las 23.00 al ver que su hija no regresaba al domicilio.

Los agentes activaron a diez efectivos municipales, junto a dos coches, dos motocicletas y una lancha de salvamento, mientras que Mossos d'Esquadra, Bomberos, una ambulancia y la embarcación de Salvamento Marítimo se incorporaban también a la búsqueda.

Sobre la 01.20 horas, los tripulantes de un yate fondeado frente a la cala en la que se vio por última vez a la joven fueron preguntados sobre si la habían visto y explicaron que estaba a bordo, después de reclamar ayuda.

El ayuntamiento de El Port de la Selva ha decidido que, por primera vez en su historia, cobrará la factura y Roger Pinart ha explicado que "el objetivo último no es cobrar el dinero, sino que se conciencien de que no se puede jugar con el servicio de emergencias".

Pinart entiende que una presunta negligencia de este tipo "no es justo que la tenga que pagar el pueblo", por lo que la familia belga ya ha recibido la factura, que se ha mostrado dispuesta a pagar.

Por su parte, el alcalde de la localidad, Josep Maria Cervera, ha destacado que "no ha sido un accidente, ni una pérdida y una rabieta por ambas partes no puede llegar tan lejos".

Desde la Generalitat se valora actualmente si también se reclama el pago de los servicios prestados.