Un impactante vídeo muestra como un coche, perfectamente estacionado, sale disparado sin control y se precipita a las aguas de un lago al este de China, en la ciudad de Pingxiang. Por suerte, la conductora y sus tres hijos, que se encontraban dentro del coche cuando este se descontroló, han salido ilesos del incidente gracias a la rápida actuación de los vecinos.

Armados de flotadores y piedras, más de una decena de personas no han dudado en lanzarse al agua para socorrer a esta familia en apuros. Momentos de tensión en los que los héroes no han dudado en tirar piedras a los cristales del coche para intentar romperlos y sacar a los ocupantes. Tras 10 minutos de angustia han conseguido rescatarlos sanos y salvos, y ser trasladados al hospital.