La localidad lucense de Palas de Rei, un pueblo de unos 5.000 habitantes, fue el escenario del accidente de tráfico más trágico de la operación salida que se inició ayer, y en el que fallecieron cuatro personas y otras tres resultaron heridas graves.

El suceso ocurrió en el kilómetro 32 de la carretera N-547 que une Lugo con Santiago, en dirección a la capital gallega. Poco después de las cinco de la tarde, un coche en el que viajaban dos jóvenes perdió el control en una recta y se salió de la calzada por el margen derecho hasta chocar con el muro de cierre de la finca de una vivienda tras el que se encontraban cinco personas. El muro se desplomó sobre los vecinos y acabó con la vida de cuatro. El quinto quedó gravemente herido, al igual que los dos ocupantes del turismo. Los tres fueron trasladados al hospital Xeral Calde de Lugo, donde permanecen ingresados.

DE LA MISMA FAMILIA Los cuatro fallecidos son miembros de la misma familia, un matrimonio de 83 y 81 años, uno de sus hijos, de 54 años, y una sobrina de 51. El hijo, junto con su mujer, acababan de llegar de Bilbao para pasar unos días con sus padres. En ese momento pasaban una calurosa tarde de verano en el patio de su casa tomando café y jugando a las cartas. Les acompañaba un amigo de la familia, que resultó herido de gravedad.

ARDUO TRABAJO La Guardia Civil lucense dirigió las labores de rescate e identificación de las víctimas, que se desarrollaron hasta la puesta de sol ante la mirada de unos vecinos conmocionados por este grave accidente. El alcalde de Palas de Rei, Fernando Pensado, ha decretado tres días de luto oficial en un pueblo, completamente sobrecogido por la tragedia.

Unas horas antes, en el término municipal de Salobral, a 10 kilómetros de Avila, dos personas fallecieron en la N-502 en otro accidente mortal enmarcado en la operación salida. Las víctimas eran los respectivos conductores y únicos ocupantes de los dos vehículos que colisionaron frontalmente.

Otro suceso ocurrió en Molins de Rei (Barcelona) cuando los mossos detuvieron a dos jóvenes por conducir en zig zag a cuatro manos con una tasa de alcohol muy alta.