Los compañeros de los tres cooperantes secuestrados el domingo en Mauritania han pasado las largas horas que han transcurrido desde entonces instalados en un hotel de Nuakchot intentando vencer el desánimo y la angustia por no tener noticias de sus amigos, en poder al parecer de una rama de Al Qaeda.
El grupo que conforma la caravana solidaria organizada por Barcelona-Acción Solidaria ha detallado cómo han vivido las últimas horas en su blog, en una crónica enviada esta pasada medianoche desde el hotel de Nuakchot donde están instalados.
Sacar fuerzas
Los cooperantes que continúan en Mauritania, y que no han decidido todavía si volverán de inmediato a Barcelona, aseguran que su ánimo oscila entre "la indignación" y "la angustia" por no tener noticias de sus compañeros, aunque afirman que quieren "sacar fuerzas de donde podamos para resistir el desánimo".
Los integrantes de la caravana pidieron ayer a la embajada española en Mauritania que les diera un plazo de tiempo para decidir si continúan con su periplo solidario o deciden volver ya a Cataluña.
Rastreo de la zona
El embajador les ha informado de que el Ejército mauritano rastrea la zona del secuestro desde la pasada noche, con el apoyo de la Guardia Civil y de las embajadas más importantes en Mauritania, Francia, Estados Unidos y Alemania, que han ofrecido apoyo logístico.
"El embajador también nos ha asegurado que, decidamos lo que decidamos, tendremos la protección policial hasta la frontera", aseguran en el blog.
Entrevistados por ''mil y un medios''
Durante todo el día de ayer, los cooperantes compañeros de Albert Vilalta, Roque Pascual y Alicia Gámez se han dedicado a atender a "mil y un medios" de comunicación que se han interesado por el secuestro.
Los integrantes de la caravana agradecen además los mensajes de ánimo que han recibido desde Barcelona.
