Ayer cumplió 42 años, 25 de los cuales los ha dedicado a jugar en el primer equipo de voleibol de su ciudad natal. Rafael Carlos Sánchez Muñoz, ´Rafa´, ha militado en los clubs con todas las nominaciones posibles de este deporte en Cáceres: Licenciados Reunidos, AD Cáceres Voleibol y AD Cáceres-Extremadura, con el que aún sigue.

El de Rafa, considerado como el mejor colocador de la historia del voleibol extremeño, ha sido un ejemplo de longevidad casi iniagualable dentro del deporte regional. Respetado y querido por sus compañeros, es un modelo a seguir.

"Aún recuerdo el primer encuentro al que fui convocado con el ´equipo de los mayores´: fue en División de Honor con el Licenciados Reunidos en la temporada 85-86. Fuimos a Valencia y jugué y todo. Ganamos y supuso la permanencia en la máxima categoría. El equipo lo entrenaba Tate y compartía vestuarios con los míticos de entonces como Vicente Candela, Diego Jiménez, Jesús María Gómez, etcétera". Ahora nadie lo duda: el verdadero mito es él.

"Solamente la calvicie nos hace adivinar los 42 años que cumple", dice de él uno de sus mejores amigos, Enrique Carrasco, ahora entrenador y durante muchos años compañero en la cancha. Con Carrasco ha completado una temporada en la que ya se había retirado. Sin embargo, en su enésimo gesto de amor a unos colores y a una idea, ha vuelto para cubrir bajas y lesiones en un equipo que acaba de descender.

El más difícil todavía se da en el propio equipo: su hijo ha jugado juega con él en el AD Cáceres los últimos tres años. Alejandro Sánchez es el líbero del equipo y, con 19 años, es una de las más firmes promesas.

"De Rafa no puedo hablar objetivamente. Somos amigos desde hace 30 años. Personalmente estoy convencido de que es el mejor jugador de la historia del voleibol extremeño, con todo el respeto para otros grandes de Cáceres y Don Benito". Para Carrasco, la gran diferencia radica en que el "compromiso" por el voleibol y el club, "y ahí Rafa no tiene comparación con nadie".

"Le hicimos el homenaje al inicio de la temporada y cuando vio la situación del equipo se puso nuevamente a disposición del club para arrimar el hombro y enseñar a relativizar las derrotas a una plantilla jovencísima. Y no hablo de su función en el club: actualmente es entrenador de las categorías inferiores, pero ha sido vicepresidente, contable... esos valores, además de los deportivos, que están fuera de toda duda, me hacen llegar a este convencimiento", resalta el técnico de la AD Cáceres.

Rafa se ha despedido este fin de semana de la alta competición, aunque hay quien ya lo duda. El deportista extremeño es capaz de todo. Y no será ni por actitud ni por aptitud.