Un juzgado de San Sebastián ha condenado a un año y tres meses de cárcel a una mujer que acusó en falso a un hombre de haberla violado cuatro veces como venganza porque éste, con el que había mantenido relaciones sexuales, le había anunciado que éstas no se iban a repetir.

Según la sentencia del caso, los hechos ocurrieron el 12 de febrero de 2005, día en el que la acusada, ciudadana dominicana, mantuvo cuatro o cinco relaciones sexuales consentidas con el perjudicado en el domicilio de éste y en un coche. Durante el juicio por estos hechos, el hombre admitió estas relaciones pero aclaró que cuando concluyeron dijo a la mujer que aquella "iba a ser la última vez", tras lo que ella "empezó a chillar y a arañarle", le rompió el teléfono móvil y le golpeó en una ceja, a la vez que le aseguró que iba a mandarlo a la cárcel.

Varias personas que escucharon el alboroto alertaron a la Ertzaintza de que "una mujer estaba agrediendo a su pareja y destrozando el domicilio", por lo que una dotación de la Policía Autonómica se trasladó a la vivienda. Al llegar al piso los agentes comprobaron que el hombre "presentaba arañazos en la zona del cuello y una brecha en la ceja izquierda" mientras que, por el contrario, la mujer "no quería ser asistida ni que la reconocieran" porque "se quería ir a su casa".

Al día siguiente, la acusada acudió a un juzgado de San Sebastián donde, "con plena consciencia de su falsedad" denunció que el día de los hechos el hombre la llevó a su domicilio, le pegó un puñetazo en el estómago, cerró la puerta con pestillo, la tiró sobre la cama, le rompió la ropa y "acabó forzándola cuatro veces". El supuesto caso de violación finalmente no llegó a ser juzgado porque la Audiencia de Guipúzcoa sobreseyó la causa después de que los abogados de la mujer renunciaran a defenderla.

Sin embargo, los tribunales iniciaron un procedimiento contra la mujer por falsa denuncia que ha concluido ahora con la condena de la acusada. Para ello, la sentencia se basa en "las declaraciones serias, firmes y absolutamente convincentes" del perjudicado, aunque también tiene en cuenta otros elementos periféricos como que, a pesar de la "extrema gravedad" de los hechos, la mujer "no manifestara nada a los agentes que acudieron" a la vivienda.

El texto judicial también tiene en cuenta la declaración del médico forense que inspeccionó a la procesada y que no observó lesiones o "afectación" de la zona genital a pesar de que supuestamente había sufrido al menos cuatro violaciones. A este médico le llamó además la atención su actitud "exagerada", de "cierto histrionismo" y "escasamente colaboradora", así como que no ofreciera "detalles concretos".

"A la vista de este conjunto de circunstancias y al comportamiento anómalo y extraño de la acusada" que "no colaboró con la Policía para esclarecer los hechos", el escrito judicial considera que "necesariamente se ha de concluir la falsedad absoluta y radical de la denuncia" de la procesada, y que ésta actuó "de forma consciente, voluntaria y premeditada". Por este motivo, le impone un año y tres meses de cárcel y una multa de 1.080 euros, así como la obligación de indemnizar al hombre con 3.000 euros.