Las rebajas también han llegado al mundo del profiláctico para fomentar su uso entre adolescentes y jóvenes. Tras la polémica campaña Yo pongo condón , el Ministerio de Sanidad ha logrado un compromiso con el sector para ofrecer en breve preservativos a 0,20 euros la unidad, asequibles a cualquier bolsillo, con envases de pocas unidades, una mayor disponibilidad y un diseño más atractivo para el público juvenil al que irán dirigidos. Los colegios de farmacéuticos, en cuyas oficinas se vende el 60% de este producto (que supera al año las 150 millones de unidades), también se han sumado al pacto y asumirán la tarea de orientar a jóvenes y familias.

EL 20% AUN NO LOS USA Pocas veces se ha visto al titular de Sanidad, Bernat Soria, tan satisfecho en una comparecencia ante la prensa, pese a que esta iniciativa se sitúa en las antípodas de otras más acordes con su pedigrí de experto en células madre. La medida no le cuesta un euro a su estrategia para reducir los embarazos no deseados y la transmisión de enfermedades como el sida. "El 20% de los jóvenes que, según datos oficiales, todavía no utilizan el preservativo en sus relaciones tendrán menos razones para seguir sin hacerlo", coincidió el ministro con los principales fabricantes.

Los representantes de esta industria no ahorraron elogios a esta propuesta de Sanidad y a la campaña para fomentar su uso. En el primer mes de su emisión, ha elevado las ventas de preservativos en un 10%, según cálculos de José Antonio Alday, director general de Control, que continuará con su imaginativa campaña de cambiar algo menos útil que lleven las chicas en el bolso por un paquete de cuatro condones. Ya ha repartido 300.000 unidades y tiene previsto intercambiar otras 500.000 este año. Además, aumentará su parque de máquinas expendedoras de 3.000 a 5.000.

En una especie de guerra de precios por hacerse con el mercado, la empresa Durex, según su director de márketing, Toni Trobat, tratará de acercarse a la oferta de cinco unidades por un euro de la francesa Be Love. Pondrá a la venta ocho condones por solo 3,99 euros en un formato atractivo y distribuirá otros 100.000 preservativos gratuitos en publicaciones para jóvenes. Los fabricantes insistieron en que ya no puede utilizarse el argumento de que el preservativo es caro para dejar de usarlo. "Los precios han caído en España un 30% en 10 años. Ya son los más baratos de Europa", defendió el director general de Control.