Austria confirmó ayer el hallazgo en su territorio de dos cisnes salvajes muertos por gripe aviaria y se convirtió así en el cuarto país de la UE, tras Italia, Eslovenia y Grecia, afectado oficialmente por la epizootia. En Alemania, al cierre de esta edición, se informó de la aparición del virus en cuatro cisnes que aparecieron muertos en una isla.

De nuevo en Austria, siguiendo el protocolo comunitario para estas situaciones de riesgo, las autoridades aplicaron una cuarentena y restringieron la venta de carne alrededor del lugar donde aparecieron las aves, en la región de Estiria. Desde otoño también han registrado casos Bulgaria, Rumanía, Croacia, Turquía, Ucrania y Rusia, países todos a las puertas de la UE, pero no dentro.

La Comisión Europea informó de que los nuevos casos tanto en Austria como en la vecina Eslovenia --cinco cisnes y una garza-- son del virus H5, pero está a la espera de confirmar si son atribuibles a la cepa altamente patógena H5N1, que fue la detectada en los cisnes de Grecia e Italia. Las muestras de las aves austriacas, localizadas en un pueblo cercano a Graz, serán enviadas al laboratorio comunitario de referencia en Weybridge (Reino Unido) para determinar de qué variante se trata.

Las autoridades austriacas aplicaron de inmediato las medidas propuestas por la UE. Al igual que en Italia, lo primero fue la creación de una zona de protección en un perímetro de tres kilómetros alrededor del foco. En esta área, las explotaciones avícolas deben mantener sus animales bajo techado y desinfectar las entradas. Asimismo, se prohíbe el movimiento de las aves fuera de las granjas y la venta de animales vivos. La UE también ha establecido un perímetro de vigilancia en un radio de 10 kilómetros.

ZOOS HOLANDESES Alemania y Francia se plantearon ayer la posibilidad de encerrar cautelarmente todas las aves de corral para evitar el contacto con aves silvestres, mientras que Holanda anunció que la medida incluiría también los zoos.

La FAO pidió nuevamente ayer a los países europeos que tomen las medidas necesarias puesto que la gripe aviaria "es un riego real" debido al posible paso de aves migratorias africanas contagiadas. No obstante, añadió, el pánico es injustificable y la situación es muy diferente de la vivida en Asia. "Europa tiene más experiencia y existe una mayor vigilancia y rapidez a la hora de actuar, ya que ha tenido que hacer frentes a otras epidemias como la fiebre aftosa", dijo Samuel Jutzi, director de Salud Animal de la FAO.