Un grupo de mudos nicaragüenses creó su propio lenguaje de signos y abrió un nuevo mundo de información lingüística, señalaron a la revista Science científicos internacionales que lo han estudiado.

Ese idioma es absolutamente propio, pero tiene similitudes notables con otros, lo que sugiere que ellos son los que le dan sus características fundamentales y universales por la forma en que lo aprenden, indica la revista en su edición de internet.

"Estamos viendo la evolución en acción, pero lo que evoluciona no es un organismo, sino todo un sistema lingüístico", manifestó Ann Senghas, del Colegio Barnard de la Universidad de Columbia, en Nueva York.