La infanta Cristina asistió ayer en Tokio a los funerales por el príncipe Takamodo, primo del emperador Akihito, fallecido a los 47 años mientras jugaba al squash. Al funeral acudieron los príncipes herederos --los emperadores nunca lo hacen-- y el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi (en la foto, junto a la infanta Cristina.) Takamodo representaba a la familia imperial en el extranjero.