Tras unos meses de confinamiento como consecuencia de la pandemia mundial por coronavirus, la mayoría está deseando que el proceso de desescalada llegue a su fin para poder disfrutar plenamente de un verano que está tocando a la puerta. Aunque durante los próximos meses estivales habrá que acostumbrarse a la "nueva normalidad", la combinación de buen tiempo y vacaciones permitirá, sin duda, recuperar buena parte del tiempo de ocio que todos hemos perdido en las últimas semanas.

Después de una primavera que ha pasado prácticamente desapercibida, el verano llega de manera oficial con el solsticio el próximo sábado 20 de junio del 2020. En España, el cambio de estación se producirá exactamente a las 23:44 horas de la noche (hora peninsular).

Fenómeno astronómico

El solsticio de junio es un fenómeno astrónomico que provoca que el Sol alcance su mayor altura aparente en el cielo y se corresponde con el día más largo y la noche más corta del año. Cuando esto ocurre, la altura máxima del Sol al mediodía apenas cambia durante varios días, situándose en el Trópico de Cáncer, lo que recibe el nombre de solsticio (Sol quieto) de verano.

Lo que realmente provoca este efecto es la inclinación del eje norte-sur de la tierra 23,4 grados hacia el Sol. Esta inclinación causa que diferentes cantidades de luz solar alcancen diferentes regiones del planeta durante la órbita de la Tierra en torno al Sol.

En el solsticio de junio, el Polo Norte se encuentra más inclinado hacia el Sol que durante cualquier otro día del año.

Celebraciones

De una manera u otra, todas las civilizaciones han celebrado la llegada del verano. En el Antiguo Egipto, sus gentes levantaron las famosas pirámides y la emblemática esfingue de Guizé en un lugar específico de acuerdo con el solsticio de verano mientras que la población inca dedicaba este día a realizar ofrendas a sus dioses.

En la actualidad, muchas tradiciones continúan vigentes pasadas bajo el tamiz de la contemporaneidad. Diferentes fiestas y rituales recorren de punta a punta el planeta para rendir homenaje al rey Sol y festejar la llegada de la estación más cálida del año.

En España, la celebración por excelencia es la noche de San Juan (24 de junio), fiesta donde el agua y el fuego son los auténticos protagonistas.

La noche del 24 de junio también es motivo de celebración en Rusia, Polonia, Bielorrusia y Ucrania. La noche de Ivan Kupala está relacionada con la fertilidad femenina y muchas mujeres lanzan coronas de flores al río mientras los hombres intentan cogerlas.

En el Reino Unido destaca el ritual que se realiza en Stonehenge donde miles de personas se acercan el 21 de junio al monumento megalítico más famoso del planeta. Una vez allí, se espera que el sol se filtre por el circulo de piedras e ilumine su centro.