El deporte está plagado de historias de superación, de esfuerzo, de sacrificio. Unas son grandiosas y son conocidas a nivel mundial. Otras, nunca rebasan el ámbito doméstico, pero aún así son tan importantes como las anteriores. Porque a veces, el simple hecho de hacer deporte te convierte es una gran superación. En ocasiones no son necesarios ni nombres. Es el caso del Club Multideportivo Aspainca, que al igual que muchas otras entidades en la región, realiza una gran labor con personas con discapacidad intelectual.

Su labor va más allá de la competición, en la que también participan --desde hace muchos años forman parte del programa de los Juegos Extremeños del Deporte Especial, Jedes--. Su finalidad es proporcionar al colectivo de personas con discapacidad el aprendizaje de diferentes disciplinas de deporte adaptado "bajo referentes de normalización y autodeterminación", explica Milagros Pérez, presidenta del Club Multideportivo Aspainca.

"Nosotros --cuenta-- queremos poner en valor la importancia que tiene la actividad física para mejorar la salud y la calidad de vida de las personas, mejorar sus destrezas y habilidades y prestar los apoyos necesarios para afrontar cualquier limitación".

Por ese motivo, para lograr que mejoren todas las destrezas, los deportistas del club Aspainca no se limitan a hacer un solo deporte. Su ´programa´ de entrenamientos incluye todas las semanas dos horas de natación, de atletismo, de fútbol y de gimnasia rítmica; los sábados realizan equitación y los domingos, pesca, "actividad dirigida por padres".

"Hacen deporte todos los días y diferentes disciplinas, lo que conlleva que tengan que aprender las diferentes reglas y técnicas de cada deporte para después demostrar lo aprendido en campeonatos regionales y nacionales", relata Milagros.

La colaboración y participación de los padres es imprescindible. "El club tiene mucha suerte de tener unos padres implicados en la actividad física de sus hijos, ya que son ellos los que les ayudan a ir a los entrenos, a tener las equitaciones preparadas, a llegar a la hora-", dice Milagros, que recalca que la existencia del club es posible gracias a la labor de mucha gente, los que lo crearon en el 1997 y los que hoy siguen colaborando, bien con su trabajo desinteresado o bien a través de ayudas de las administraciones.

Pero los protagonistas de todo esto son los deportistas, los que cada día se esfuerzan un poco más para mejorar, los que siempre tratan de rendir al máximo para superarse a sí mismo. "Son fantásticos, tanto cuando están con sus familias como cuando deben viajar lejos de los suyos. Aguantan jornadas enteras de competición en una piscina, en un estadio o en pleno campo con frío o calor, disfrutando de todo lo que se les ofrece", concluye Milagros.