Cada vez son más los deportistas marroquís que aprovechan las competiciones en el extranjero para emigrar ilegalmente. En los últimos días se han conocido dos nuevos casos. El primero en España, en la localidad alicantina de Rojales, donde seis jugadores del equipo de fútbol de Tánger han abandonado su club.

El primer futbolista desertó el pasado fin de semana, después de un torneo de fútbol con otros dos equipos. La desbandada masiva fue el martes. Según el portavoz del Tánger, Mohamed Mitihui, aquel día el equipo había a Alicante. A la hora de volver al hotel, cinco jugadores no acudieron. Mitihui explicó que los desaparecidos no tienen documentación, ya que el viajan con pasaporte colectivo.

Los Juegos Olímpicos tampoco escapan a las deserciones. La familia del levantador de pesos marroquí Yasín Zuaki informó de que el joven ha decidido quedarse ilegalmente en Grecia. El atleta, participante en la competición de halterofilia, abandonó a su selección pocas horas antes de regresar a Marruecos. Zuaki, que fue eliminado en primera ronda, se había quejado a la prensa de que la precariedad de medios de su selección le había obligado a pedir prestada la camiseta a un levantador de pesos turco.