Cuatro empleados del cementerio Burr Oak de Alsip, en el estado de Illinois (Estados Unidos), han sido acusados de desenterrar y desmembrar alrededor de 300 cuerpos y revender después el espacio de sus tumbas, según informaron ayer las autoridades. Los acusados se enfrentan a posibles cargos federales por enterrar unos cadáveres encima de otros y desechar algunos en la parte trasera del cementerio, en el que están enterrados famosos como la cantante de blues Dinah Washington. Los acusados se enfrentan a un máximo de 30 años en prisión por desmembrar un cuerpo humano.