El culebrón de Palomares, iniciado hace 45 años, parece más cerca de su fin. Si los trabajos de descontaminación empezasen hoy, los residuos podrían estar fuera de España en tres años. Esa es la estimación de Ecologistas en Acción, que ayer mostró su satisfacción por la visita, hace una semana, de un grupo de especialistas de EEUU para analizar el terreno.

El responsable de campañas antinucleares de Ecologistas en Acción, Paco Castejón, explicó que la zona se encuentra en una fase de prelimpieza en la que se deciden aspectos técnicos, como el tipo de filtros y de contenedores adecuados. Cuando empiecen las tareas de limpieza, que durarán en torno a dos años, se instalarán carpas presurizadas para separar los residuos tóxicos de la tierra. Finalmente se pasará a una fase de control de unos 10 meses para verificar que no quedan rastros de contaminación.

UNOS 35 MILLONES En opinión de Igor Parra, el delegado del grupo ecologista para Palomares, la prioridad y "el mejor aporte que puede hacer EEUU" es "llevarse los residuos", ya que en España no existe ningún lugar adecuado donde almacenarlos. Parra se mostró de acuerdo, incluso, en que sea España quien asuma todo el coste (que sería de unos 35 millones de euros) a cambio de alcanzar el "objetivo fundamental" de que los residuos salgan del país.

Pese a valorar los últimos avances, los ecologistas piden un calendario concreto y saber la partida presupuestaria a la que se cargará el coste de la operación. También criticaron la poca transparencia de la Administración.