FERNANDO F. G., de 32 años, y Olena M., de 28, reconocieron que habían pegado con una correa y una zapatilla a su hija de 5 años, que ingresó en un hospital de Santander con hematomas. El juez los dejó en libertad, pero les retiró la custodia de la niña y de una hermana pequeña y se la pasó a los servicios sociales. EFE