Los Mossos d´Esquadra detuvieron ayer al administrador de la empresa de productos farmacéuticos Genox Farma, de Lliçà de Vall (Vallès Oriental), por la muerte de un vecino de Terrassa y la intoxicación de otras 13 personas que ingirieron un preparado diurético que debía contener magnesio y que, en realidad, tenía manganeso como principal ingrediente. Los investigadores han reunido en las últimas horas suficientes pruebas para probar que el acusado quiso comercializar un lote de bidones de manganeso caducados y ordenó reetiquetarlos con una nueva fecha. Fue en ese proceso de cambio de etiquetas cuando se produjo el fatídico error.
Uno de esos bidones, de 10 kilos, fue a parar en marzo a una importante farmacia de Barcelona que elabora fórmulas magistrales. Entre los productos propios está Anhidro, compuesto básicamente de sulfato de magnesio y que la farmacia distribuía a otros establecimientos de Barcelona de este tipo como un diurético apropiado para procesos de adelgazamiento. ¿Qué ocurrió? En la última semana, y coincidiendo con la comercialización del lote preparado con el último bidón, 13 personas que habían consumido Anhidro sufrieron igual sintomatología. Uno de ellos falleció el lunes pasado en la Mútua de Terrassa tras sufrir un fallo hepático, y su mujer presentó una denuncia en los juzgados de Terrassa. La Unidad Central de Consumo de los Mossos d´Esquadra se hizo cargo de las pesquisas.
Todo parecía apuntar a una negligencia, pero la situación del administrador de Genox Farma se complicó a raíz de la existencia de productos caducados en al almacén y la voluntad de comercializarlos. Tanto es así que el administrador, Javier S. F., de 49 años, fue citado a declarar ayer como imputado junto a su abogado, pero finalmente los investigadores prefirieron no esperar y detenerlo en su empresa. Tiene antecedentes por delito contra la salud pública.
