Diez supuestos integrantes de un "escuadrón de la muerte", que operaba en una comunidad indígena del departamento guatemalteco de Sololá, fueron detenidos por las fuerzas de seguridad, informaron hoy las autoridades.

Agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) y fiscales, con ayuda de habitantes de la población de Santiago Atitlán, capturaron anoche al grupo, al que vinculan con crímenes y distribución de drogas en esa comunidad indígena.

Los 10 sospechosos fueron detenidos en base a una orden judicial emitida por la juez de la población, Yanet Gramajo, bajo los cargos de secuestros, asaltos, ultrajes, extorsiones y de integrar "escuadrones de la muerte".

Entre los detenidos figuran dos mujeres y un menor de edad, según el informe de la Policía. Durante los operativos, las fuerzas de seguridad se incautaron de uniformes militares, armas de fuego, gorros pasamontañas y drogas, sin precisar la cantidad.

Los detenidos fueron consignados a un tribunal del municipio de San Lucas Tolimán, en Sololá, ante el temor de que la población de Santiago Atitlán intentara lincharlos.

La presencia de "escuadrones de la muerte" en Guatemala fue común durante la época del conflicto armado interno (1960-1996) con el fin de eliminar a los que se consideraba como enemigos políticos del gobierno de turno.

Sin embargo, activistas de derechos humanos han denunciado en varias ocasiones que todavía existen esos grupos en varias poblaciones, en las que se dedican a cometer delitos.

La semana pasada, el procurador de los Derechos Humanos, Sergio Morales, denunció que en el sur del país opera uno de esos grupos, que mantiene atemorizada a la población, y exhortó a la Policía hacer las investigaciones del caso.