La Policía Nacional ha detenido a once personas, entre las que se encuentran un futbolista en activo y dos retirados, así como dos representantes de jugadores, en una operación contra el tráfico de drogas en la que se ha incautado de un alijo de 600 kilos de cocaína de gran pureza. Según ha informado la Policía, la operación se inició a mediados del año pasado, tras saber la Policía que un individuo, en situación de tercer grado penitenciario y con antecedentes por tráfico de drogas, estaba buscando financiación para comprar cocaína en el extranjero.

Éste a su vez contactó con el presunto líder del grupo, Zoran Matijevic,ciudadano de origen serbio pero de nacionalidad francesa y representante de futbolistas. Gracias a su profesión, realizaba continuos viajes a Suramérica en los que, al parecer, aprovechaba para llevar a cabo contactos y coordinar operaciones de transporte de estupefaciente hasta Europa.

El cabecilla se apoyaba para todas estas gestiones en otras personas también relacionadas con el mundo del fútbol, entre ellas P.S., antiguo jugador en varios equipos españoles, como el Hércules de Alicante. En labores logísticas, y a las órdenes de Matijevic, se encontraban C.D.L.V.D., futbolista en activo del Rayo Vallecano, y P.A.R., representante de futbolistas, quienes presuntamente actuaban en Madrid preparando la recepción de la droga y su posterior distribución. En esta labor de distribución participaba también un ciudadano peruano que ha sido detenido.

Por su parte, en Valencia, la organización contaba con otras tres personas que trabajaban en las labores de preparación de la documentación necesaria para la importación del contenedor donde se escondía la droga. En una rueda de prensa para explicar la operación "Ciclón", el comisario de la UDYCO de la Jefatura Provincial de Madrid, José Luis Conde, ha relatado que lo más complicado ha sido "deslindar" quién se relacionaba con los detenidos por cuestiones meramente relacionadas con el fútbol y quién estaba al tanto de sus negocios de narcotráfico.

Según los investigadores, los cinco arrestados pertenecientes al "mundo del fútbol" eran los encargados de recaudar el dinero necesario para la compra de la droga entre su círculo de relaciones a modo de "fondo de inversión". La droga había partido de Argentina camuflada en un cargamento de maquinaria de molinos de viento, lo que llamó la atención de los investigadores ya que los supuestos receptores de la mercancía, detenidos en Valencia, se dedicaban en teoría al negocio de los cítricos.

El contenedor salió de un puerto argentino a mediados de febrero, su primer destino fue Tánger y, desde allí, fue llevado hasta Algeciras (Cádiz) y finalmente a Madrid. Una vez que el contenedor llegó a la capital, y antes de que la organización se hiciese cargo de la mercancía en una nave industrial de Fuenlabrada, se procedió a la detención simultánea de once personas, siete en Madrid, tres en Valencia y una en Alicante.

En el interior del contenedor había numerosas cajas metálicas y de forma rectangular que escondían unos 45 paquetes de cocaína con un peso aproximado de 600 kilos. La investigación ha estado dirigida por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón y por la Fiscalía Especial Antidroga, y ha contado con la participación de la UDYCO Central y del GRECO Galicia, junto con la UDYCO de la Jefatura Superior de Policía de Madrid y la colaboración del GRECO Levante y de la UDYCO de Valencia. La operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.